"Situación limite en la plaza de toros de Zaragoza"

Tarde y mal. Así se ha manifestado la Diputación Provincial acerca del asunto de la plaza de toros. Con un comunicado publicado en los principales periódicos de la región. Sin dar la cara. Con una misiva cobarde y fullero que viene a decir que Serolo se está riendo de todos los zaragozanos y mientras tanto, ellos, por su incompetencia y desidia, nada pueden hacer. Que nos tapemos la nariz hasta que el hedor desaparezca. Y que la fetidez no comenzará a irse hasta que un juez dicte sentencia. Allá por el 2014. O para cuando España gane Eurovisión.

Por si aún no habéis leído el dichoso comunicado, lo cojo prestado a unadeldos, y aquí os lo enseño.

Además del comunicado oficial de la Diputación Provincial de Zaragoza y del análisis brillante de Ángel Solís, el Heraldo de Aragón, en su edición impresa, ha tenido a bien publicar una carta al director que yo mismo firmo. La trascribo a continuación por si os interesa su lectura:

"Situación limite en la plaza de toros de Zaragoza"

Reconforta ver como su diario, en la edición impresa del pasado miércoles, 25 de Septiembre, tuvo a bien tratar la desdichada situación en la que se encuentra la plaza de toros de Zaragoza. Los aficionados aragoneses a los toros nos encontramos sin amparo, huérfanos de una explicación oficial, u oficiosa, que calme nuestra zozobra, y con el sentimiento general de que somos los grandes olvidados por administraciones públicas y medios de comunicación generalistas.

Esta situación límite en la que se encuentra nuestro coso bicentenario, construido bajo la orden de Ramón Pignatelli y que el año que viene cumplirá doscientos cincuenta años, ha sido motivada por una serie de desdichados acontecimientos responsabilidad, en su mayor parte, de la Diputación Provincial de Zaragoza, a su vez propietaria de la plaza, y de sucesivas empresas encargadas de su explotación. 

Actualmente, el escenario es crítico, donde peligra, incluso, la celebración de la propia feria taurina en honor a nuestra Patrona. Un proceso judicial (para el desahucio de la actual empresa por incumplimiento flagrante del contrato) del que poco se sabe, una nefasta visión de la corporación provincial en la redacción del concurso de explotación, y una fatídica y perversa gestión de la empresa adjudicataria, han derivado en este desolador paisaje donde ya está en juego la propia plaza tal y como la hemos conocido durante su larga historia.

Por último, y agradeciéndole que no deje en el olvido en el futuro cercano la delicada tesitura de la plaza de toros, permítame recordar que, según el profesor Juan Medina, Doctor en Economía de la Universidad de Extremadura, la Feria taurina del Pilar genera cerca de nueve millones de euros a la economía local.

Y mientras, Serolo esta descojonándose de risa.