Y Urdiales en la grada. Corrida de Alcurrucén en Zaragoza

Allí estaba el torero arnedano. En el palco del plus, vestido de calle y no de luces. Ausente en la Feria pero presente en la memoría de muchos aficionados maños. Hoy tampoco había hueco para él.

Impecable de salida la corrida de Alcurrucen. Astifinísima toda. Seria y entipada. Segundo, tercero, y sobretodo quinto, pusieron en bandeja posibilidades de triunfo, o al menos de lucimiento. Sin acabar de romper, los toreros estuvieron ciertamente ofuscados. Pasivos unos e incapaces otros. La corrida me dejó frío.

Castaño, lucero, calcetero y girón el que abrió plaza. Hecho jirones acabó el capote de Curro Díaz en una lidia lamentable. El principio de la tarde, un despropósito. Nunca vi aliviarse tanto a Montoliu con los palos. Irreconocible. Un presagio de lo que luego haría su matador. Curro Díaz no se dio coba, en absoluto. Abrevia. Mitin con los aceros.

Castaño, ojo de perdiz y vociblanco en segundo lugar. Abanto de salida, marca de la casa. Buena vara la primera. Con los riñones. En la segunda cumple. El toro es fijo y pronto. Desclasado en la embestida pero con transmisión. Para tirar de él y llevarlo toreado. El francés no liga ni un pase. Y mientras Urdiales en la grada.

FOTO: Nayade Moncín (burladero.com)

Negro y alto el tercero. Largo como el solo. Derriba al caballo y el picador queda atrapado por sus piernas con el peso del caballo inmovilizándole el tren inferior. Costó liberarle de tal presa. Sensacional la cuadrilla de Leandro en el segundo tercio. Con los rehiletes en los pares y la percalina en la lidia. Cumbres. Leandro ofrece distancias al toro, el toro acepta el embite. Vibrante comienzo. A pesar de la disposición del vallisoletano, el alcurrucen rebaja, con mucho, las expectativas creadas. Leandro tampoco se ajusta. A menos. La faena se diluye a medida que el ímpetu del toro se desvanece. Media estocada. Petición no tenida en consideración por las instancias palcales. Bien el Presidente.

Largo como un día sin pan el cuarto. Con calcetines blancos, calcetero. Ligeramente bizco pero de seriedad imponente. Reservón. Sin entregarse. Con la cara por las nubes. Huidizo. Curro Díaz no ayuda para tapar sus defectos, mas bien todo lo contrario. Lamentable la tarde del jienense. Apático y desganado. Y Urdiales en la grada.

Negro lucero el quinto. Un tío. De salida se encampana en la boca de riego. Aqui estoy yo. El padre de los de ayer. Buen toro. Repetidor. Humillado y entregado en la muleta. Bautista descolocado siempre, incluso en el cite primero. Despegado, sin ajuste. Se agarró más veces al lomo que pases de mérito dio. Mientras tanto el toro sigue embistiendo. Y Urdiales en la grada. Se va sin orejas uno de los mejores toros de la Feria. El toro, notable alto. El torero suspenso sin paleativos.

Astifino, como toda la corrida, el de la jota. Parado en la muleta. Sin posibilidades. Aún era de día cuando acabó el festejo. Ayer casi salimos al amanecer. Hoy tiempo de sobra para tomar una caña con los amigos que han venido de fuera a ver el final de la Feria. Un gustazo.

Mañana los esperados veraguas de Prieto de la Cal. Esperemos que embistan.